Os cuelgo el programa delpróximo maravilloso concierto que vamos a dar en el Casal del Metge, el domingo 27 de Noviembre a las 19h.
El cartel lo ha diseñado el hermano del director Juan Cantarell; creo que es muy bueno.
Os esperamos a todos y a todas!
ORQUESTA DE LOS MÉDICOS
aventuras de una orquesta amateur
miércoles, 16 de noviembre de 2011
sábado, 12 de noviembre de 2011
Concierto de Caspe de Junio 2011 - Making of
Está bien, sé captar una indirecta.
No os han gustado las fotos del concierto de Junio.
Las hizo mi hija con mi cámara, y está claro que necesita un cursillo.
Así que he decidido colgar también las fotos del ensayo previo, que me ha enviado el fotógrafo y músico Miquel Viñals. Todas las fotos que aparecen aquí son suyas, y le agradezco mucho que me las haya prestado.
Pues sí, siempre nos encontramos una o dos horas antes de los conciertos para hacer una prueba de sonido, o directamente un ensayo extra. Aquí podéis vernos más distendidos, y no tan peripuestos.
Mostes gràcies, Miquel, per donar-me permís per a fer-les servir!
No os han gustado las fotos del concierto de Junio.
Las hizo mi hija con mi cámara, y está claro que necesita un cursillo.
Así que he decidido colgar también las fotos del ensayo previo, que me ha enviado el fotógrafo y músico Miquel Viñals. Todas las fotos que aparecen aquí son suyas, y le agradezco mucho que me las haya prestado.
Pues sí, siempre nos encontramos una o dos horas antes de los conciertos para hacer una prueba de sonido, o directamente un ensayo extra. Aquí podéis vernos más distendidos, y no tan peripuestos.
Esta se titula "cada loco con su tema". Juan Cantarell está a la derecha dándonos instrucciones sobre cómo mover las sillas en la segunda parte para que quepa el piano. |
Esta muestra los violines "amb els arcs amunt". El guapo violinista a la derecha de Helia es Roderic, de quien os he hablado pero no os había mostrado en fotografía, creo. |
Aquí me gusta la belleza de las tonalidades diferentes de las maderas de nuestros celli y contrabajos. |
Santiago y yo tocamos tan bien que ya no necesitamos ni mirar la partitura, ni mirar al director, ni siquiera estar despiertos... |
En primer término, super-sexy Ulrike, que este año está en su país, y que nos dirigio junto a su coral el mes pasado en un concierto en la iglesia de Santa Agnès. |
Mientras Juan azuza a los violines, Kim ha visto a Miquel fotografiándola. |
Chicoparatodo Pedro Zacarías, que tocó el solo de oboe. También es un excelente viola. |
Ulrike, Paddy, y detrás, Josep Maria Taulé |
Rubén en acción. He de reconocer que mi hija le hizo muchas más fotos. |
Los celli que mejor suenan y también los más guapos. |
Ni idea de cómo comentar esta foto. |
A Kim se la puede acusar de algunas cosas, pero no de no mirar al director. |
El mejor director que hemos tenido. |
Las diferentes maneras de hacer un mi. |
Aquí podréis entender la diferencia entre adagio... |
...y presto. |
Por fin entró el público. Se llenó todo el local. |
Un momento del concierto de Marcello. |
De pie, saludando. |
Mostes gràcies, Miquel, per donar-me permís per a fer-les servir!
viernes, 11 de noviembre de 2011
Galería de fotos: concierto de la calle Casp, Junio 2011
Estas fotos tomadas durante el concierto no son muy buenas pero como mínimo están llenas de acción.
Pedro como solista de oboe. Concierto de Marcello |
Saludos. En primer plano, Pedro y Juan Cantarell |
Kim ha escuchado algo que no la convence |
Rubén Herrera se prepara para el Concierto de Mendelssohn |
Rubén Herrera y Juan Cantarell |
Ulrike, la concertino |
Rubén en el segundo movimiento |
Más Rubén |
Y más |
Rubén en el tercer movimiento |
Roser, la contrabajista, también es flautista. Delante, Santiago y Ramón |
Josep y Jordi |
Durante la media parte hay que vigilar dónde se dejan los instrumentos. Corres el riesgo de que alguien del público los tome prestados... |
Roser |
Vista de los celli |
Rubén y Ulrike saludadando al final |
jueves, 10 de noviembre de 2011
Paco Castelló
"Me daría miedo pilotar un avión que no hubiera construido yo mismo". Paco Castelló
Paco murió demasido joven el pasado domingo. Fue el primer viola de nuestra orquesta durante muchos años. De él se podría hablar durante páginas enteras, pero hoy sólo quiero dejar esta frase que me dijo un día en un descanso del ensayo.
Hacedme un favor, intentad pareceros a él en algo, aunque sea algo muy pequeño, durante el resto de vuestras vidas.
jueves, 3 de noviembre de 2011
Movimientos musicales
La música, como la existencia, es un viaje en el que no existen caminos llanos; todo son subidas y bajadas.
Este es el estuche de mi cello. Es de fibra de vidrio, y no pesa demasiado. Lo llevo colgado y puedo meterme en los transportes públicos. Tiene el tamaño exacto para pasar sin dar golpes por las máquinas del metro y de los ferrocarriles.
Pero hay algunos compañeros mucho más osados que yo.
De todos modos, la cosa se complica si tienes hijos. Aquí podéis comprobar cómo, para que mi hija no se deforme la espalda, le llevo su cello por la calle cuando vamos juntas. Mientras tanto, ella prueba un Yamaha eléctrico que se quiere comprar para no molestar a los vecinos cuando estudie por la noche.
Para adaptarse a ello algunos músicos hemos tenido que ingeniárnoslas para no sufrir lesiones musculares y articulares a causa del transporte de nuestro instrumento. Los contrabajos son tan grandes que prácticamente siempre llevan ruedas. En la orquesta disponemos de uno propio, de manera que uno de los dos contrabajistas acude cada martes sólo con el arco.
Los violonchelos en cambio, al ser más ligeros y transportables, disponen de estuches y fundas para poder llevar colgados o agarrados por las asas.
Esta es una pequeña historia sobre cómo llevamos los violonchelos al local de ensayo y a los conciertos en nuestra orquesta.
Mi cello decansando delante de la puerta de nuestro local de ensayo |
Pero hay algunos compañeros mucho más osados que yo.
Santiago en bicicleta |
Ramón, en moto |
La viola de Kim en un transporte más adecuado para instrumentos pequeños (foto: Miquel) |
El violonchelista Matthias Weinmann lleva las partituras en este carro. |
Y así fue cómo decidí un buen día comprarme un estuche. Pero no fue por la protección ni por el peso. Fue porque a mis gatos les encantaba dormir en la funda de mi cello mientras estudiaba, y luego se me llenaba todo de pelos.
Mi gata Sivi durmiendo dentro de la funda de mi cello |
María tocando un ultraligero |
Transportando por Barcelona el cello de mi hija, que está todo lleno de firmas, frases y graffiti. |
domingo, 5 de junio de 2011
De niños con talento prodigioso
Un saludo muy cariñoso desde este blog para el niño prodigio Michael Andreas Haeringer, a quien sigo desde que era diminuto y empezó a tocar el piano como un virtuoso en la escuela de música a la que acudimos mi hija y yo.
Sábado después de comer de un fin de semana soleado de Junio en Barcelona. Normalmente apetece descansar, tomar un café, mirar una película, dar una vuelta por la ciudad, hacer una siesta, quedar con los amigos, acudir a algún concierto.
Pero nosotros… ensayo extra al canto!
Lo necesitamos porque tenemos un concierto el próximo jueves, en el que presentamos el Concierto en Re menor de Mendelssohn, con Rubén Herrera como solista.
Apuntáos la fecha: Jueves 9 de Junio a las 20 horas en la Sala Torelló del Colegio de los Jesuitas de la Calle Casp número 25.
Rubén durante el ensayo |
Comenzamos el ensayo un poquitín tarde porque nadie encontraba las llaves del local. Rubén fue superpuntual y tenía prisa porque al terminar el ensayo tenía una actuación en un festival de música primaveral. Poco a poco fuimos llegando absolutamente todos. En fin de semana.
Comenzamos a pasar el primer tiempo, y a los pocos compases Juan Cantarell nos para y nos ilumina con las circunstancias vitales de Felix Mendelssohn en el momento de crear esta obra (1923, cuando tenía catorce añitos), su formación rigurosísima, su admiración por Bach, Mozart, Beethoven, y el por qué tenemos que considerar cada compás como un tiempo en frases de cuatro compases. Como premio a su paciencia, el acento de los compases donde él quería: desaparece el tópico “efecto anacrusa” y suena en su lugar una frase inteligente y sutil que, efectivamente, cambia mucho el carácter de la melodía y hace que ocurra algo inmaterial al escucharlo, de sentido encriptado, que es precisamente lo que hace que a música sea tan prodigiosa y llegue al alma.
Pasamos al Andante, primero sin Rubén, y en la segunda mitad Juan tiene que bajar de la tarima y avanzar amenazadoramente hacia los segundos violines y la violas para que toquemos fortissimo un pasaje solo de orquesta. “Con desesperación!” grita con su voz de barítono. Y de nuevo, consigue el efecto deseado.
Tercer movimiento. El jovencísimo Rubén Herrera marca el tono con un armónico de su violín. Lo difícil es ajustar la orquesta y hacer que suene como un velo aterciopelado que acaricie la sonoridad prodigiosa de Rubén y su violín.
Juan Cantarell y Rubén Herrera |
El motivo alegre y chisposo del tercer movimiento, que nos vamos pasando como en una partida de ping pong, resplandece hasta poner la carne de gallina cada vez que lo acomete el solista. Al terminar, en lugar del acostumbrado golpeteo aprobador en el atril, todos soltamos los arcos para aplaudir de verdad y gritar bravo.
Cuando Rubén dio el último Re conclusivo y se volvió sonriente a nosotros, sorprendidos de lo que acabábamos de generar, comprendí, por qué merece la pena venir a tocar el sábado y todos los demás días que no son sábado en que también venimos a tocar.
Y desde mi esquinita con mi violonchelo, en un sábado de Junio por la tarde, pensé en Felix Mendelssohn a los catorce años componiendo este concierto tan brillante, pensé en Rubén Herrera, a la misma edad terminando de forma prematura los estudios de grado medio de su instrumento, y en el director, el maestro que teníamos delante modulándonos, exprimiendo lo máximo de nuestras capacidades para dar colorido a esta obra, Juan Cantarell, que a los catorce años debía de tocar el piano como un ángel, supervisado por Alicia de Larrocha y su musical familia, además de estudiar el violonchelo, armonía, composición y dirección de orquesta.
Mendelssohn niño |
Cuentan que Felix Mendelssohn a los catorce años tenía una orquesta para poder experimentar. Un juguete para un niño especial y genial. A los que creen en las hadas no les costará ver que su espíritu se ha vuelto a reunir esta semana de Junio con estos otros dos niños geniales, Ruben Herrera y Juan Cantarell, para jugar un poco con un juguete llamado Orquestra Ars Medica.
Si creéis que exagero, el jueves lo podréis comprobar.
viernes, 20 de mayo de 2011
Galería de imágenes del concierto de Mayo
"Quien quiera construir torres altas deberá ahondar mucho en los fundamentos". Anton Bruckner
Lo hicimos muy bien. Lo decimos nosotros y lo han dicho otros. Lo hicimos como nunca.
Por eso me limitaré a poner una galería de fotos del concierto y sus preparativos, que espero os guste.
Con Santiago |
Paddy y Rubén |
Preparando |
Jordi antes de la prueba de sonido |
Ulrike, la concertino, con Rubén |
Juan probando el sonido |
Foto romántica - movida - de Rubén |
Cellistas |
Preparados listos ya |
De pie |
Pedro Zacarías tocando el concierto de Marcello para oboe |
Más saludos |
Jaume |
Los celli |
Toni con las fundas de los contrabajos al fondo |
Con Lupe |
Lupe y el violinista Dr. Barberà |
Médicos cellistas |
Concentrados |
Médicos cellistas |
Con Lola |
Nosotros tocando felices |
Josep Mª Taulé |
El cello de Jordi que suena como el terciopelo |
Helia y Ferràn desenfundando |
Carolina |
Paddy repartiendo carpetas rojas |
Lupe y Jordi |
Josep Gelpí |
Rosa |
Autofoto con Helia |
Autofoto con Domènec |
Ulrike montando el atril |
Juan Cantarell y Domènec moviendo el piano |
Toni |
Super Kim |
Autofoto con Kim |
Jordi con una espontánea |
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